Riego por goteo de la fresa
Todas las plantas, incluidas las fresas, requieren agua y nutrientes para el desarrollo normal y la fructificación.En condiciones naturales, la lluvia en forma de lluvia puede no ser suficiente para el desarrollo normal de la cultura, por lo que para lograr el objetivo de obtener altos rendimientos, muchos utilizan el riego por goteo de las fresas.
La dosificación de agua y nutrientes a las raíces de fresa se realiza con la ayuda de un sistema completo de pequeñas tuberías de agua y gotas que permiten regular el suministro de agua en la cantidad adecuada (la cantidad de agua puede variar según la fase de desarrollo del cultivo).Como suelo para plantas, use un sustrato especial (mezcla de turba, lana mineral) que promueve la rápida penetración de la humedad en las raíces de la planta.El sustrato se gira mediante una película a prueba de luz y se coloca en un palé, mientras que el exceso de solución nutriente se recolectará en él; pueden usarse para una mayor humedad del suelo.
A diferencia del riego ordinario de fresa, el goteo lo salvará de caminar con un embudo en las camas.Existen varios métodos para suministrar agua al sistema de goteo.En una gran área de fresa, la solución nutritiva se alimenta a las raíces de la planta bajo una cierta presión utilizando bombas de agua; en este caso, la bomba se utiliza para distribuir el agua de manera uniforme a través de los tubos.Si el cultivo de fresas es insignificante, se recomienda utilizar riego natural.En este caso, se utiliza una gran capacidad, se coloca en una colina para crear algo de presión.SiEs posible realizar riego por goteo de fresas y en grandes áreas, sin el uso de soluciones especiales (agua ordinaria).
Para que la fresa crezca y se desarrolle normalmente, es necesario crear un régimen adecuado de temperatura y humedad en toda la vegetación. La temperatura promedio del aire debe mantenerse dentro de los 24 grados, y, para diferentes variedades, es desigual. Por lo tanto, para las variedades tempranas de fresas, la temperatura promedio varía en el rango de 18 a 23 grados, para las variedades medias de 22 a 27 grados, para las calidades posteriores de fresas: de 25 a 30 grados. La humedad óptima del aire para las fresas debe ser 60-70%. Para un crecimiento normal y la formación de una cosecha de fresas, debe recibir suficiente luz (no menos de 60,000 lúmenes) durante 12 horas al día.
Las fresas no se consideran plantas hidrófilas, por lo que el suministro de agua y nutrientes a sus raíces debe controlarse estrictamente, la humedad excesiva puede retardar el crecimiento del cultivo y causar diversas enfermedades. Cuando gotee fresas, tenga cuidado con el agua y no se exceda.